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Cimbra Andy Ruiz el Topo Chico


Publicación:13-09-2019

TEMA: #Box  

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Las cinco peleas finales están pactadas a tres rounds de tres minutos cada uno, con un minuto de descanso entre cada round

El boxeador mexicano Andy Ruiz, actual campeón de la WBO, WBA, IBO y IBF en la categoría de peso pesado, y el regiomontano Francisco Rodríguez “el Chihuas”, Campeón supermosca del OMB, visitaron el penal del Topo Chico en Monterrey, para atestiguar las finales del torneo penitenciario de box.

Un total de 74 boxeadores de los diferentes centros de reclusión de Nuevo León, como Apodaca, Cadereyta y el Topo chico, tomaron parte en dicho torneo, que hoy llega a su fin con la realización de 10 peleas en los pesos welter, ligero, superligero, mediano y super pesado.

Las cinco peleas finales están pactadas a tres rounds de tres minutos cada uno, con un minuto de descanso entre cada round.

“¡Ánimo ca...!”

Ruiz, rompió el protocolo de seguridad para subir a uno de los ambulatorios donde saludó a los internos y les habló cómo él pudo enmendar el camino gracias al deporte y les dijo de manera enfática.

“Yo sé que es duro, pero sí se puede, todo es posible, todo se puede hacer, ¡ánimo cabrones!”.

El trágico penal del Topo Chico, donde durante los últimos años ocurrieron varios motines, el más reciente en 2016 y que dejó un saldo de 49 muertos, fue convertido en las primeras horas de la mañana de este miércoles en una arena para que se llevaran a cabo las finales del “Campeonato Intercarcelario de Box, Guantes por la Paz”, del sistema penitenciario de Nuevo León.

Hoy sucedió algo que ninguna persona hubiera imaginado sucedería dentro del “Topo”, un evento deportivo y pacífico.

Además de Andy Ruiz estuvieron los pugilistas José Francisco “El Chihuas” Rodríguez, ex campeón mundial de peso mosca, así como Jhonny González, ex campeón mundial de peso Gallo y Peso Pluma.

Los boxeadores, junto a internos del reclusorio y autoridades carcelarias, presenciaron dos de cinco peleas pactadas para los campeonatos del sistema penitenciario de Nuevo León en los pesos: Ligero, Wélter, Superligero, Mediano y Semipesado.

Andy Ruiz subió al cuadrilatero y habló ante los presentes de cómo el deporte ayuda a enmendar el camino en la vida.

“Ya he estado en ese lugar y momento donde ustedes están, pero cambié. Estaba en las malas y en las buenas también, pero creyendo sólo en Dios y en el boxeo me cambió la vida. Me da mucho gusto estar aquí con ustedes y hablar un poco de mi vida y compartir lo que me pasó”, expresó el campeón Pesado.

“Cambié creyendo en mí, nadie creía en mí, nadie pensaba que iba a ganar porque estaba gordito, pero no, pegaba duro y tenía ese sueño de ser el primer mexicano campeón del mundo (en peso pesado). Entonces sí se puede; a los que salgan hagan algo positivo. Yo sé que es duro, pero sí se puede, todo es posible, todo se puede hacer, ¡ánimo cabrones!”, les dijo el pugilista mexicano.

El Campeón no tuvo el mínimo recato en saludar a decenas de internos de mano, tomarse fotos y firmar autógrafos, incluso al grado de romper el protocolo de seguridad y subir a uno de los ambulatorios, donde varios reos lo aclamaban a través de los barrotes.

Andy Ruiz contradijo todos los pronósticos el 1 de junio pasado y escribió una página inédita en la historia del boxeo mexicano, al noquear en el séptimo round al multicampeón británico Anthony Joshua para convertirse en campeón unificado de la Federación Internacional de Boxeo (FIB), Asociación Mundial de Boxeo (AMB) y Organización Mundial de Boxeo (OMB).



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