Fallece la Reina de los Antrax

Con estudios de enfermería, Claudia Berenice Ochoa Félix, de 35 años de edad, quien vivió con el estigma de ser la emperatriz de la célula delictiva denominada de los “Ántrax”, en esta entidad, falleció presuntamente a causa de una intoxicación con alcohol y el consumo de un medicamento controlado.

Nacida en el seno de un matrimonio de clase media, en el fraccionamiento CANACO, ubicado en la salida norte de la capital del estado, estudio en uno de los planteles del Colegio de Bachilleres de Sinaloa y cursó la carrera de enfermería.

Según los datos que se aportaron, la joven madre de tres menores de edad, dos de ellos varones, luego de convivir la madrugada del viernes pasado en una discoteca, en compañía de un joven, se trasladó a una residencia del fraccionamiento Isla Musala.

En ese lugar, de la sección de las privadas de Pontevedra, continuaron la fiesta por varias horas más, en la que consumieron bebidas alcohólicas y medicamentos controlados, por lo que horas después su acompañante detectó que ella no despertaba y solicitó auxilio.

Su cuerpo, que fue reclamado por sus padres, fue entregado la madrugada de este domingo, sin que la Fiscalía General del Estado emitiera mayor información sobre su muerte.

La imagen de la joven madre que se viralizó portando armas automáticas, en vehículos y residencias de lujo y conviviendo con grupos musicales de éxito, la convirtió en una mujer con mucho poder, vinculada al Cártel del Pacífico.

En junio del 2014, Claudia Berenice, en compañía de su hermano y sus hijos, ofreció una rueda de prensa donde solo dio lectura a un documento y dijo ser víctima de difamación y calumnias en las divulgaciones en medios nacionales e internacionales que la colocaron como peligrosa.

Atribuyó que el hecho de que un medio de comunicación del estado de Puebla divulgó fotos que le fueron subidas a sus redes sociales, las cuales no corresponden a ella, para que esta información fuera retomada, lo que le causó un grave daño a su vida personal.

Ochoa Félix se quejó en forma continua que su hijo menor era víctima de bullying en la escuela, a causa de todo lo que se divulgó de ella sin sustento, basados en datos y fotos que le fueron subidas en sus redes, sin acreditar su identidad, lo que le causó un daño moral.