¿Venganza o hegemonía?

Hoy en punto de las 17:00 horas en el Estadio BBVA viviremos historia pura, y esto sucede ya que Rayadas y Tigres disputarán por tercera ocasión el título de la Liga MX Femenil.

Luego del empate a una anotación en el Estadio Universitario en la Ida de la Final entre Tigres y Rayadas, las emociones estarán a tope en este juego de vuelta y se espera un lleno absoluto en el Gigante de Acero.

Si hablamos sobre la palabra presión y la adjudicamos a una de las dos instituciones en esta Final Femenil, seguramente tendríamos que inclinarnos en el lado de las Rayadas del Monterrey.

Las dirigidas por Héctor Becerra finalizaron la campaña haciendo un récord de puntos y siendo líderes al final del torneo, situación que las podría reflejar como favoritas por cerrar en casa y ante su público, pero la historia indica que esto no es un factor en contra para las Tigrillas.

En las dos anteriores ediciones donde Rayadas y Tigres se enfrentaron en una Final de Liga MX, el resultado acabó siendo favorable para la escuadra auriazul, ya que en el Clausura 2018 y un año después en el mismo certamen de verano, terminaron venciendo a las de la Pandilla.

La primera ocasión las Tigrillas eran dirigidas por la leyenda felina Osvaldo Batocletti, en aquel entonces y ante un lleno absoluto en el Gigante de Acero, las visitantes acabarían derrotando a las de azul y blanco en la instancia de los penales.

Un año después se volvieron a topar en la misma instancia y en el mismo recinto, de nueva cuenta el Estadio BBVA presenció el título de Tigres Femenil en el Clausura 2019.

En aquella ocasión Tigres Femenil rápidamente se fue en ventaja tras dos goles en la primera parte conducto de Blanca Solís y Lizbeth Ovalle, mientras que por Rayadas descontó Alicia Cervantes al minuto 69.

Ya son dos triunfos que significaron título felino en la rama femenil entre Tigres y Rayadas, por lo que otro campeonato en el Estadio BBVA y ahora bajo la gestión de Roberto Medina, podría ser la hecatombe albiazul sobre su eterno rival… Pero para ser justos mejor hay que esperar al silbatazo final y conseguir presenciando historia pura, esa misma que nos la han entregado dos grandes instituciones como las que hoy chocarán en el Gigante de Acero.