Piden a AMLO renacionalizar industria eléctrica

Integrantes de la Coordinadora Nacional de Usuarios en Resistencia (Conur) solicitaron al presidente Andrés Manuel López Obrador la renacionalización de la industria eléctrica y el reconocimiento constitucional de este servicio como derecho humano. 

En una carta dirigida al Ejecutivo federal, resaltaron que “las tarifas eléctricas en México están por encima de lo ofertado en los países desarrollados y representan un sacrificio para un pueblo trabajador que percibe los salarios peor remunerados en todo el mundo".

En rueda de prensa, el representante de los usuarios organizados, Gustavo López Rosas, pidió “borro?n y cuenta nueva” en el pago del servicio eléctrico, luego de la toma de Luz y Fuerza del Centro (LyFC) en octubre de 2009 que derivó al aumento exponencial de las tarifas.

En la sede del Centro Nacional de Comunicación Social (Cencos), Rosa María Hernández Miranda, Enrique Hernández Olivares, Lázaro Marín Conde y Jorge Corona Alvarado, otros de los representantes de la Conur, pidieron detener la entrega de contratos a empresas privadas, así como una tarifa social y justa.

Mencionaron que después de 59 años de que el gobierno nacionalizo? LyFC, antes denominada Mexican Light and Power Company, se repiten las condiciones negativas para los usuarios de la electricidad como las que se vivieron en los años previos a la nacionalización”.

“Fueron las administraciones del régimen neoliberal de Carlos Salinas hasta (Enrique) Pen?a Nieto los responsables directos de entregar progresivamente los bienes y sobre todo el servicio público a las grandes trasnacionales para crear lo que hoy se conoce como el mercado eléctrico mayorista", refirieron.

Indicaron que a costa de su rentabilidad y retorno al capital, la Comisión Federal de Electricidad (CFE) subsidia a organismos privados, no sólo en las tarifas de transporte, sino también en Certificados de Energías Limpias, contratos de suministro de gas, y todo tipo de servicios y proveeduría.

"La reforma energética impuso la doctrina delirante del todo como mercancía, un mercado excluyente, de angustia y discriminación para millones de hogares económicamente imposibilitados para absorber las altas tarifas de luz”, agregaron.