México a un paso de ser régimen autoritario

México está a un escalón de ser considerado un régimen autoritario, ya que en el Índice de Democracia de “The Economist” el país presentó una disminución y se ubicó en la categoría de “regímenes híbridos”.

El análisis realizado por la Unidad de Inteligencia correspondiente a 2021 de la empresa de medios británica colocó en el sitio 86 de 167 países a la democracia mexicana.

Con una calificación de 5.57 de un total de 10, México fue degradado a “régimen híbrido” bajo la administración del presidente Andrés Manuel López Obrador, categoría a la que también pertenecen Bangladés, Senegal, Ucrania y Hong Kong.

El término “régimen híbrido” es la tercera de cuatro categorías que utilizó el Índice y se define como “un nuevo punto bajo para la democracia global”.

“El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, continuó sus esfuerzos por concentrar poder en la rama ejecutiva. En agosto, López Obrador dijo que buscaría una reforma total de las autoridades electorales del país, al considerar que están parcializadas contra su gobierno, y dijo que están ‘al servicio de la antidemocracia”, señaló la revista.

De acuerdo con el ranking, el país se encuentra en la categoría de “defectuosa”, más cerca de los “regímenes autoritarios” que de las “democracias plenas”.

“El mandatario incrementó sus ataques contra los medios y se ha vuelto cada vez más intolerante con sus críticos, incluyendo aliados. Los elevados niveles de la violencia de los cárteles tuvieron un impacto en las elecciones de medio término en junio y representaron riesgos crecientes para la democracia mexicana”, afirmó “The Economist”.

Agregó que si bien el Presidente mantiene elevados niveles de aprobación, los mexicanos expresan bajos niveles de confianza en el gobierno.

“La categorización de México como un ‘régimen híbrido’ en vez de ‘democracia deficiente’, junto con las tendencias señaladas, sugieren que una mayor erosión de la democracia en México es probable conforme se acercan las elecciones de 2024”, alertó.

“The Economist” utiliza cinco parámetros para calificar la democracia en los países evaluados: proceso electoral y pluralismo; funcionamiento del gobierno; participación política; cultura política y libertades civiles. Según la calificación, un país puede ser considerado una democracia plena, una democracia deficiente, un régimen híbrido o una autocracia.

Noruega es la nación que destaca por ser una democracia plena con un puntaje de 9.75; mientras que Afganistán es el país peor evaluado, con 0.32 puntos, luego de atravesar el regreso del gobierno talibán.

Asimismo, Estados Unidos, Francia y España de ser “democracias plenas” pasaron a ser “democracias deficientes”.